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domingo, 29 de enero de 2017

Excusa non petita



   No nos engañemos, todos buscamos el amor de nuestra vida, pero ¿por qué tenemos que ceñirnos a uno solo? El mundo está poblado de gente muy interesante con la que nuestra vida se podría enriquecer y de quien podríamos enamorarnos. Tenemos que ser generosos y amar a más de una persona. Vivir es compartir y con cuanta más gente compartamos nuestros sentimientos más creceremos como personas. Porque si amamos a más de una a la vez ¿porqué tenemos que decidirnos solo por una?
   Pero vamos, que si ya estás con alguien y de repente o no tan de repente te das cuenta que prefieres estar con otra persona y no se te ocurre cómo romper sin dañar demasiado al otro, aquí te presento una serie de excusas que te pueden servir en tu día a día como rompedora de corazones o ilusiones ajenas .

   Excusa 1
   La visita del Señor

Estabas en el trabajo como cada día y de repente has tenido una Epifanía. Has visto una luz al final del pasillo y te has levantado para ver qué era. Sin saber cómo has terminado en el despacho del Señor director, puesto que este era el foco del que procedía la extraña luz, y su cegador resplandor te ha obligado a taparte los ojos levantándote la camisa hasta ellos, mientras recordabas que ese día no llevabas sujetador. Sin embargo has preferido salvar tu vida a tu vergüenza y has estado en esta posición mientras unas manos tocaban tu "alma" y una voz te susurraba que te despojaras...de todas tus ataduras.
Después de eso no podías seguir como si nada hubiera pasado y una vez confesado a tu chico que ibas a empezar una vida nueva porque habías sentido la llamada del Señor, lo dejas todo para irte a vivir a una comunidad...a las afueras. Con jardín, piscina y jacuzzi. Que el Señor sabe proporcionar a sus fieles todo lo necesario para hacerles feliz.

Excusa 2
Encontrarte a ti misma

Después de muchos años con una misma persona a tu lado, es difícil que te acuerdes cómo eras antes de que él o ella llegara a tu vida, y tras haberlo meditado largamente, o al menos un par de días, has llegado a la conclusión de que si no sabes quién eres no puedes hacer feliz a los demás. Necesitas alejarte de todo, o al menos de tu hasta entonces "amorcito" y reflexionar y hacer ejercicios de autoconocimiento, para lo que es necesario buscar ambientes distintos a los que te has acostumbrado y sobre todo a gentes diferentes. Y claro, una vez reencontrada contigo misma llegas a la conclusión de que es mejor lo nuevo conocido que lo viejo caduco. Pero todo de buen rollo y muy zen.

Excusa 3
Alergias

El cuerpo humano es muy extraño y a veces ocurre que lo que un día nos sentaba divinamente, al día siguiente hace que nos salga sarpullido. Esto puede ocurrir con los alimentos, los tejidos y las parejas. Hoy hacer el amor es muy placentero pero dos días más tarde te salen granos y ronchones por todo el cuerpo y sintiéndolo mucho tienes que dejarlo por prescripción médica. "No es por ti es por el doctor".
Y si esa persona te quiere más que a su vida, o a su colección de comics, te dejará ir para que sanes, aunque él se desangre de pena. Hasta que aparezca una tirita, claro.

Hay otras muchas y variadas excusas, pero por hoy ya tenemos bastantes, que tampoco es cuestión de aburriros con los planes de fuga.